jueves, marzo 24

Cocinitas y mi pequeña historia personal

¿Os apetece que juguemos a las cocinitas?
¿Si? ¿Si?...¡vale! 
Hoy os traigo tres enlaces bonitos y un trozo de historia personal en plan desahogo.
Pues manos a la obra y podemos tener unas tan coquetonas como las de:
paperblog:  una cocinita portátil reciclando una caja de vinos.

Este bonito hornillo con una simple caja de cartón y algo de pintura de babygadget.
O la de una mamá muy creativa en bebé Andoo que requiere un poco más de maña pero parece que con muchas ideas y algo de trabajillo practicando se puede conseguir porque ella afirma no tener experiencia y mirad qué impresionante resultado, muy baratita y usando materiales de Ikea.

Da igual por la que optes, más elaborada o menos lo que cuenta es jugar con mucha imaginación ¿no es verdad? ^_^

Y aquí va mi historia si tenéis ganas de leer.
Reconozco que tuve una cocinita preciosa que me regalaron mi cuñada, mi hermano mayor y una buena amiga de éstos y mía cuando tenía 6 años. No tenía el mismo encanto handmade que las anteriores citadas porque venía ya de serie hecha pero sé que la personalicé muy bonita y siempre que pude la iba llenando con nuevos cacharritos y tonterías varias hasta hacerla completamente a mi gusto y más mía. LLegué a almacenar un montón de cosas que recopilaba en bazares, reciclando, en puestos de artesanía, cosas que me regalaban, algunas que me haya fabricado la abuela (como unas preciosas cortinas de vichy verdes) y esas miniaturas tan geniales que hacen en Imaginarium, ya conoceréis esa cestita de la compra  productos de supermercado de marcas reales en miniatura, esos cacharritos de metal... Vaya, una pasada y creo que una auténtica reliquia, no por su valor material, más que nada por tantos años recopilando arsenal para la misma y por toda la gente que había participado en esos años. Esas cosas es lo que siempre me caía en reyes o en mis cumpleaños.
Hace cosa de 4 años decidí darla en herencia a mi prima Inés pensando que sería un generoso y valorado regalo por su nacimiento, no hay muchas niñas en nuestra familia y creí que para ella era lo más acertado y bonito de mi parte.
Tal fue mi desconsuelo cuando vi que la pequeña ya la ha destrozado y perdido la mitad del género que entré en un bucle de lloriqueos y quejas de esas que tardas rato en superar.
Con la niña no me iba a enfadar porque es muy pequeña, con 4 años no es para entrar en peleas, jajaja ^_^ pero con mi tita pillé un rebote impresionante. Bien sabía el valor sentimental que tenía y el cariño y la disposición con la que le regalé todo y lo bien presentado que estaba (me esmeré, lo juro). Y en muchas de las visitas para ver a Inés, le iba regalando alguna cajita con algún detalle más. Yo tenía pensado que mi tia se la diese cuando Inés tuviera 6 ó 7 años, pero en un arrebato de: que si la niña ya está muy espabilada, que si mira cómo juega, que si qué graciosa (y es cierto que lo es) pues se la sacó para jugar. Y eso no me parece mal, pero ahí la dejó a su suerte y en menos de un mes la cocinita está penosa y le faltan 3/4 partes de todo aquello que tenía.
Y ahí sigue para ser destrozada impunemente (aunque ya poco o casi nada hay que hacer).
Seguro que mi tita sigue sin darse cuenta lo mucho que me joroba ver la cocinita así,  y eso que le di mi buena opinión al respecto. Seguro que no repara en el cariño puesto, entiendo que Inés sea un terremoto a los 4 años y todavía no sepa cómo cuidar sus posesiones pero también entiendo que con esas edad los niños ya son muy listos como para poder ir entendiendo que las cosas hay que respetarlas si los papás se lo van enseñando. Mi hermano es mucho más pequeño que Inés y le llamamos la atención como se ponga tontorrón con la gente o las cosas. Por supuesto entiende y para.
Lo que más me deja perpleja: si por casa de mi tia hemos ido buscando las cosas que han ido desapareciendo de la cocinita y no aparecen...¿Dónde estarán? No había nada vivo que se escape por sí solo...o la peque se lo ha ido llevando al parque, al cole y por ahí se ha ido perdiendo o todo lo que ahí había ha sido producto de mi imaginación. Jajaja. Yo que sé, pero me ha ayudado mucho escribirlo y desahogarme.
Tita, si entras por aquí y lees, ya sabes que tu sobrina tiene mucho carácter. No te enfades pero entiendeme y deja de pensar que soy una adolescente rabiosa. Dame la razón por una vez aunque sea, joé.
Inesilla...ya te haré algún regalito majo para que tengas otra cosa bonita de tu prima, pero te lo daré cuando seas menos traviesa. Pero que sepas que te quiero mucho y que este veranito cuando vaya a Toledo a verte te voy a comer a besos.

Y a mis guisantes lectores, gracias por leerme y disculpad el pedazo de rollo de hoy.
¿Tenéis vosotros alguna historia similar con algo que tenía mucho valor sentimental? Si es así, mi apoyo ^_^

Muá.

13 comentarios:

  1. ays.. seguro que Ines llegara un dia que dejara de romper cositas.. y le dara mucha pena haber roto esa cocinita.. me la veo diciendole a su mama... porque me la diste tan pronto!!??

    guapaa muchos besos.. que bien viene desahogarse de vez en cuando!!
    mil besos!

    ResponderEliminar
  2. La primera opción me encanta ^^ Me parece original lo de pintarle los hornillos en la tapa de la caja y aprovechar así el propio "envase" de los juguetitos de cocina.

    Te entiendo perfectamente con lo que cuentas. A mí me pasaba lo mismo cuando a mi madre se le ocurría la "gran" idea de regalarles mis antiguos juguetes a mis primos pequeños. Me daba mucha rabia ir a casa de una prima, por ejemplo, y ver muñecos que antes habían sido míos con la cara pintada completamente de bolígrafo o con el pelo cortado a lo bestia... Supongo que mis primos están acostumbrados a que les compren cada cosa con la que se encaprichan, pero yo de pequeña tenía tan sólo unos pocos juguetes (algunos incluso heredados de mi hermana mayor) y siempre me enseñaron a cuidarlos.

    Un besito :)

    ResponderEliminar
  3. Me ha encantado ver la creatividad en estas fotos de cocinitas, a mi me hubiese encantado tener una, son mi pasión en las tiendas de niños, cuando las veo siempre me paro un rato en el escaparate, es como si alguien fuese a entrar y regalarme la cocinita de mis sueños infantiles.
    Respecto a Inés, yo he sido la pequeña de tres y mi hermana odiaba que me pasasen sus muñecas, yo era de las que les lavaba el pelo, les cortaba y las pintorrejeaba, y ya no volvían a ser las mismas, y los libros madre mía que destroyer he sido, mordidos por un conejito que tenía y todo.
    Pero luego creces y te das cuenta de lo valioso que era todo, ay si lo hubiese cuidado...
    Un besote, feliz semana y si te apetece quedas totalmente invitada a nuestro 1º cumpleblog.

    ResponderEliminar
  4. Entiendo perfectamente tu rebote (y qué maja eres dejando ese mensaje a tu tita :)). Fue un gesto precioso por tu parte regalarle tu cocinita.

    Me encantan las ideas que has puesto, a ver si puedo apañar una de cartón para el colegio en el que trabajo :D

    ResponderEliminar
  5. HAY mi pobre... creo que en el fondo todas te entendemos, mi pena era que siempre quise un coche de capota y como en casa eramos 6 hermanos no podian permitirselo, teniendo yo 13 años y mi hermana 7 se lo reglaron a ella y hay me ves a mi mas grande que otra cosa y jugando con el cochecito y mi hermana encantada con un balon... y es que cada uno da valor a cosas distintas.
    BESOS
    un beazo y piensa

    ResponderEliminar
  6. YO te entiendo muy bien, creo que algunas personas cuidamos mucho nuestras cosas, esas que aunque son materiales para nosotr@s tienes un valor sentimental muy grande por lo qu ehan significado para nosotr@s.
    Yo tenia la barbie Jazmin, de la pelicula Aladdino y creeme cuando te digo que era mi tesoro mas preciado, para mi era intocable y tenia que esconderla para que nadie la tocara y la estropeara.
    Un dia fui a jugar con ella y le habian roto la cabeza, ya no tenia arreglo.Mi hermana y mi prima la habian cogido y como eran mas pequeñas la rompieron.
    Creo que nunca he llorado tanto por algo asi, jajajja.
    Anda que vaya rollo te he soltao.
    Un besote guapa

    ResponderEliminar
  7. Hola guapa! llevo un retraso en leerte que es demasiado... 7 entradas nuevas me dice mi reader... veo que estás más activa blogueramente hablando y eso me alegra muchisimo!
    Yo también te entiendo muy bien, a mi me pasó algo parecido con mis amados clicks. En casa me dejaban una mesa enorme para que montara mi pueblecito click con las casas que tenía, mesón, granja, estación de tren, calles, semáforos, pasos de cebra... y hasta una casa que me hizo mi hermana de madera monísima, yo estaba encantada porque me dejaban tenerlo todo siempre montado en una habitación, era feliz... hasta que llegaron mis primos pequeños, sobre todo uno, el mayor de ellos, que era un pieza de cuidado y nadie le regañaba, así que cada vez que venían de visita yo sufría lo indecible. Al final, opté por recogerlo todo y subirlo a una habitación de la planta de arriba de la casa para que no lo vieran... hubo días que lloré desconsolada cuando me rompían algo, todos mis clicks que eran como 100 tenían nombre!!

    Con el tiempo, mis sobrinas son las que han terminado jugando con ellos (y yo con ellas y con ellos, jejeje) y nunca los han tratado mal porque saben lo importantes que fueron en mi infancia y los recuerdos tan maravillosos de tardes enteras jugando que me vienen a la memoria ahora.

    Besitos guapa, voy a seguir leyéndote!!

    ResponderEliminar
  8. Por favor, qué cocinitas tan adorables!, dan ganas de volver a la infancia solo para poder jugar un ratito!!!!!

    ResponderEliminar
  9. Ay Pepa, vaya desconsuelo.
    Se ve todo el corazón que le pusiste al regalo para tu prima y bueno, a ella es verdad que no se le puede tener en cuenta por lo chiquinina que es, pero está bien el toque de atención a la tita. Ojalá guarde lo que quede y pueda remontar la cocina de alguna manera con unos cuantos años más de dedicación y mucho cuidado.

    Yo también he vivido algún que episodio de esos con algunas cosas. Sobre todo con un maletín de pintura que estaba yo con él como mateo con su guitarra, casi sin usar los pinceles y los botes para usarlo cuando fuese más mayor y cada vez que entraba alguien en mi habitación lo esturreaban todo y al final acabé sin pinturas, con pinceles rotos, todo sucio, casi vacío y hecho un desastre.
    Al menos conservo la maletilla que portaba todo. Quizá algún día la rellene con cosas nuevas y ahí sí la guardaré con mucho mimo en plan gollum.

    Un besico mu fuerte!!

    ResponderEliminar
  10. Me encanta tu blog! te sigo desde ahora!

    el mio: http://littleglitters.blogspot.com

    estás invitada :)

    ResponderEliminar
  11. qué pena Pepa, si tu primita la hubiese cuidado bien (o más bien tu tía) luego te la podría haber devuelto para cuando tú tuvieses hijos que jugasen con ella, pero bueno lo hecho hecho está y tú has sido muy generosa.
    Las cocinas que has puesto son super originales, igual algún día me animo a hacer la primera que es la más facilita y superpráctica para guardar.
    Un besito!

    ResponderEliminar
  12. Después de leer vuestros comentarios me siento mejor.
    Lo mejor sería animarme a hacer una a mano, ir recolectando cacharritos y a ver si se la dejo bonita para que tenga otra.

    Muchos besos a todas. Procuraré contestar una a una este finde que viene.
    Muá.

    ResponderEliminar
  13. Vine el otro día y me quedé sin comentar... que no di abasto con el montón de cositas chulas que habías subido!!!!! Y lo de tu primita... ainssssss yo te entiendo perfectamente porque le tengo mucho aprecio a cositas que no tienen ningún valor pero para mí son muy importantes. A mí en casa me pasa un poco lo mismo con Nil, que es un poquillo terremoto. Jana no rompió nunca nada y fue muy cuidadosa pero Nil no lo es y a veces me hace enfadar viendo como trata según qué. Por eso no le dejo "mis" libros ilustrados si no es "bajo la supervisión de un adulto". Cuando aprenda a tratarlos mejor ya lo haré... Y me parece muy buena odea lo de que recolectes cacharritos de nuevo e incluso puedes hacértelos tú con el montón de cosillas curiosas y lindas que encuentras siempre en la red. La cosinilla de la caja de vinos me ha gustado un montón y en cuanto pille una me pongo a tunearla fijo!

    Un besote enorme guapa!!!!

    ResponderEliminar